Tradicionales ajustes de cuentas – Diario TNPRESS

La mafia sorprende a todas las sociedades por la pasividad en su sanción y por el trabajo de coimas a la policía, a la fiscalía y a los mismos medios de comunicación, que también se someten a la suciedad, que tiene consecuencias de sangre. El Gobierno, en su obligación de proporcionar la vigencia del Estado de Derecho, debe exigir al Ministerio Público actuaciones concordantes con su obligación, y a la Policía someter a órdenes claras que puedan despejar cuadros de malvivientes. De la misma manera la ciudadanía debería tener medios más seguros como para denunciar la operación de los carteles menores en sus comunidades, no aislarlos a la cobardía natural. La ley que debe primar es la que proteja a la población, y de ninguna manera muertes pueden ser propiciadas por la justicia de las mafias, pues ello muestra cual norma es la que rige realidades. ...[Leer más]